Ni el sistema de alarmas, ni las cámaras, fueron elementos que sirvieron para disuadir a él o los autores del cuarto robo que afecta, en lo que va del año, el jardín infantil Naranjín de Los Andes, dependiente de la Junta Nacional de Jardines Infantiles, JUNJI.
La directora del establecimiento ubicado en calle Yerbas Buenas Sur, Nora Arellano, visiblemente afectada por este episodio, manifestó que el robo derivó en la suspensión de la atención de los más de 90 párvulos y lactantes que ahí reciben diariamente.
Los antisociales, accedieron al establecimiento saltando el cierre perimetral, para luego sustraer dos cilindros de gas de 45 kilos, correspondientes al área de alimentación del jardín. No es primera vez que roban este tipo de especies, generando no solo un perjuicio en la medida que roban en un recinto que atiende a pequeños pertenecientes a familias vulnerables, sino también porque muchos papás y mamás dependen de su correcto funcionamiento, para de esa manera concurrir al trabajo tranquilos.
Cabe consignar que ya la semana pasada, desconocidos habían ingresado a robar, también dos cilindros de 45 kilos y todavía no se había logrado reponerlos. Así, con este nuevo episodio, no hubo más alternativa que disponer la suspensión de la atención de los 98 párvulos.
La directora señaló que se efectuó la denuncia a Carabineros, donde también ya habían notificado sobre los otros tres episodios.
